
Soy Raquel Cruz
Me especializo en el acompañamiento de procesos terapéuticos relacionados con el trauma, el apego y los trastornos de la alimentación.
Trabajo desde un enfoque integrador y profundo, que considera a la persona en su totalidad: cuerpo, mente, historia y vínculos.
Escuchar, acompañar, cuidar.
Soy una mujer sensible, curiosa e introspectiva. Desde siempre me ha conmovido todo aquello que no se ve a simple vista: un gesto que guarda memoria, una palabra que contiene más de lo que dice, un silencio que merece ser escuchado.
Esa forma de mirar el mundo es también la base de cómo acompaño en terapia.
Un espacio para dar voz a tu historia.
Creo firmemente en la importancia de un entorno terapéutico donde la seguridad, la confianza y el respeto permitan que la persona se escuche, se descubra y, poco a poco, se reconcilie con su historia.
Acompaño con cuidado a quienes sienten que una parte de sí ha quedado atrapada en el dolor, en el silencio o en la confusión.

La historia detrás de
LIRA nace como un espacio simbólico y real.
Un lugar donde lo que ha sido silenciado pueda encontrar voz.
Donde el síntoma se lea no como un error, sino como una pista.
Donde la historia personal pueda ser escrita de nuevo,
en armonía con lo que una es,
y no con lo que aprendió a ser para sobrevivir.